jueves, 7 de junio de 2012

Capítulo 9.

Lunes. Tocaba trabajar. No tenía ganas y es que me sentía rara después de lo del domingo. Estuve hablando con Audry sobre lo de Zayn y llegamos a la conclusión de que le debía una gran disculpa, intenté que me contara qué le pasaba a Louis pero no hubo manera así que lo dejé estar. Desde entonces no había vuelto a ver a los chicos. Sí, había pasado solo un día pero eso ya era demasiado para mí. Posé con la ropa que formaba la colección llamada "Party Collection" y James y Mark me dijeron que tenía vacaciones hasta principios de abril, eso significaba que iba a estar más de un mes sin trabajar y, para qué mentiros, la idea me encantaba.
Después volví a mi casa y pasé allí todo el día hasta que anocheció. No salí con Ronnie porque seguía enfermo y no fui a la casa de los chicos porque tendría que pedirle perdón a Zayn y encima soportar que Louis me ignorara sin motivo alguno.
Entonces me llegó un mensaje, me sorprendió mucho que me lo mandara él, no me lo esperaba.
Tommo: "Me aburro."
¿Cómo? ¿En serio me mandaba un mensaje diciéndome eso después de pasar de mí? Eso era raro pero ¿qué le iba a hacer? Se me caía todo con Louis así que sonreí y respondí.
Yo: "Tengo hambre."
Tommo: "Pues ven a cenar a mi casa xx"
Eso era una de las cosas que más me gustaban de él, que hacía lo que quería, que le encantaba divertirse y que estaba loco. Y yo también era así. Cosa que me hacía pensar que seríamos una pareja perfecta, pero claro, yo ya tenía al novio perfecto así que Louis tendría que aguantarse. No tenía ganas de arreglarme así que me puse un chándal de mi hermano, mi beanie de colores y los botines, cogí las llaves, el móvil, un poco de dinero y salí de mi casa. Me planté en la casa de los chicos más pronto que nunca y Louis me abrió la puerta con una gran sonrisa. Decidí no preguntarle por qué me había ignorado y por qué hacía esto así tan de repente porque quizás no quisiera hablar del tema así que pregunté por los chicos.
- Han salido a comer por ahí y Liam está con Danielle.
- ¿Por qué no te has ido con ellos? 
- No me apetecía - estaba raro, no era el mismo de siempre, apenas sonreía y su mirada no brillaba como lo hacía antes.
- ¿Y Eleanor? - a juzgar por la cara que puso creo que no debí preguntar por ella.
- En Manchester - se levantó, fue a la cocina y volvió con una gran pizza entre las manos. De jamón york, queso, champiñones y orégano, mi favorita. - Espero que te guste, me ha costado mucho hacerla.
- ¡Pero si es precocinada! - reí y el rió conmigo, a partir de entonces volvió a ser el mismo de siempre o incluso más molesto. No paraba de hacer bromas y yo no podía comer la pizza tranquilamente. Entonces, cuando pensaba que había dejado de comportarse como un niño de cinco años, mojó su dedo en el tomate de la pizza y me dio un toquecito en la nariz.
- ¡Ahora eres un payaso! - dijo entre risas. Me reía tanto que me desequilibré y me caí de la silla, entonces Louis se rió más fuerte y se levantó para ayudarme pero en vez de levantarme tiré de él y calló a mi lado. Nos quedamos tirados en el suelo riéndonos hasta que nos empezó a doler la barriga, entonces nos calmamos y nos levantamos. Nos sentamos en el sofá a ver una película sobre dinosaurios destrozando el planeta o algo así, notaba que Louis se aburría y to también.
- ¿Y si hacemos otra cosa? - pregunté - es que como sigamos viendo esta peli moriré de aburrimiento.
- Sí, vayamos fuera, al jardín.
- Louis, está lloviendo y hace frío.
- Sí ¿y? - Yo odiaba el frío y la lluvia y Louis lo sabía, él esperaba que dijera que no así que lo sorprendí diciendo que sí. Nos pusimos los abrigos y salimos afuera. El jardín era enorme así que simplemente anduvimos como si de un parque se tratase.
- Mira las estrellas - dije mirando al cielo, Louis se paró a mi lado.
- Sí, son preciosas - los dos estábamos ahí, mirando hacia el cielo con los ojos achinados para que no nos molestaran las gotas de lluvia que caían sobre nosotros. Entonces me cogió de la mano y nos miramos durante unos minutos. ¿Qué estaba pasando? No podía reaccionar, quería soltarlo e irme a mi casa pero no podía, quizás no quería. Entonces sonó el timbre y por fin reaccioné.
- Louis, llaman a la puerta - me soltó la mano.
- Sí - sonrió - vamos a dentro, seguro que son los chicos. - entramos, les abrimos y nos quitamos los abrigos empapados. Los chicos me saludaron con un abrazo colectivo menos Zayn y luego nos preguntaron qué hacíamos así de mojados. Mientras que Louis les contaba lo que había pasado, cogí a Zayn por le brazo y me lo llevé a la cocina.
- Lo siento - dije nada más entrar.
- No pasa nada ¿vale?
- Sí, sí que pasa. Te he juzgado mal y te he dicho cosas que no tenían nada que ver con la realidad solo porque no estaba bien informada, lo siento.
- Del, te he dicho que no pasa nada - rió - entiendo que te pusieras así porque además todavía no habías hablado con Audry, está todo olvidado ¿vale?
- Gracias - sonreímos, abrazamos durante unos minutos y volvimos con los chicos. Zayn se fue a ducharse y entonces me llegó un mensaje de Audry: 
"Me voy a Irlanda a vivir con mi madre y la familia de mi padre"
No, no podía ser. Me levanté del sofá y me despedí de los chicos con un simple "adiós", se quedaron confundidos pero me fui. Cogí el metro y fui lo más rápido que pude a la casa de Audry, eran las 1am pero aún así Millie me abrió la puerta y me dejó pasar. Subí rápidamente a su habitación y entré sin llamar. Ahí estaba Aud, tirada en la cama con los ojos hinchados de llorar.
- ¿Me explicas esto? - le enseñé el mensaje.
- Me voy a Irlanda a vivir con mi madre y la familia de mi padre - dijo.
- Sé leer - reí pero paré al recordar la situación - ¿por qué te vas?
- A mi madre le ha salido un trabajo allí y debemos irnos.
- ¿Para siempre? - asintió y comenzó a llorar - No, no te vas a ir, si eso pasa me voy contigo.
- Sí, sí me voy, pasado mañana después de comer y tú te vas a quedar aquí.
- ¿No puedo hacer nada?
- No - lloró más fuerte - te voy a echar de menos.
- Por favor, no te despidas ahora porque no me apetece llorar - reímos - nos despediremos en el aeropuerto ¿vale? - asintió - me tengo que ir a casa, mi madre estará preocupada.
- Vale, nos vemos luego - me fui hacia la puerta - una cosa más, no le digas nada a los chicos.
- Pero...
- Pero nada - me interrumpió - no les digas nada, por favor.
- De acuerdo, hasta luego - salí de la habitación, me despedí de Millie y me fui a mi casa. Entré sin hacer ruido, me puse el pijama y me acosté. Entonces me llegó un mensaje al Whatsapp.
Hazza: "¿Por qué te has ido así, tan de repente?"
Yo: "No puedo decírtelo"
Hazza: "Vamos, Del por favor"
Yo: "Está bien, pero no se lo digas a nadie más"
Hazza: "Suéltalo de una vez"
Yo: "Audry se va a Irlanda pasado mañana"
Hazza: "¿Para siempre?"
Yo: "Sí :'("
Hazza: "No puede ser"
Yo: "Lo es."
Hazza: "¿No podemos hacer nada?"
Yo: "Eso mismo le he dicho pero ella me ha respondido que no"
Hazza: "Tú tranquila, que mientras que pueda hacer algo, Audry no se va de Londres"
Yo: "Gracias, Harry xx."
Apagué le móvil y me dormí.


Lo que había pasado con Louis no paraba de rondar por mi cabeza así que decidí mandarle un mensaje para aclararlo todo y que las cosas no quedaran tensas entre nosotros.
Yo: "¡Hey Lou! Solo me preguntaba si podríamos tener una charla en privado, hay algo que necesito sacarme de la cabeza x".
Esperé a que respondiera pero no lo hizo. Pasaron 10 minutos, nada. 30 minutos, todavía no había respondido. 45 minutos y no me había respondido. Entonces, después de una hora y media esperando, recibí un mensaje.
Tommo: "Claro ¿vienes a mi casa? xxxx".
Me puse nerviosa, en ese mensaje había cuatro "x", o sea, me mandaba cuatro besos. Él nunca me había mandado cuatro, siempre dos o incluso ninguno pero añadiendo un "te quiero", pero esos cuatro besos me habían emocionado. Busqué algo decente que ponerme por toda la habitación, lo cual me costó mucho ya que estaba hecha un desastre, pero al final me puse lo mismo que para la firma de discos: pitillos vaqueros, camiseta turquesa, sudadera amarilla, converse del mismo color y me recogí el pelo en una perfecta trenza de espiga. Cogí el metro y, de nuevo, tardé muy poco en llegar. Antes de llamar al timbre, miré al rededor para ver si había alguien, no quería que empezaran rumores sobre mí. No había nadie así que llamé.
- Heeeeeeeeeeeeeeeeey ricitos - dijo con una gran sonrisa invitándome a pasar - ¿qué pasa? - cerró la puerta, me senté en el sofá y se sentó junto a mí.
- Bueno... yo... no sé como decirlo...
- Solo dímelo - dijo con esa preciosa sonrisa que lo caracterizaba. En ese momento no me importaba nada más, ni siquiera mi novio, me olvidé de Eleanor, éramos solo Louis y yo.
- Básicamente me preguntaba por qué me abrazaste dos veces en la firma, por qué me apodaste ricitos, por qué eres tan así conmigo teniendo a alguien tan perfecta como Eleanor. Y no es justo, Louis ¡no es justo! Yo estaba muy feliz con mi novio antes de conocerte y ahora ni siquiera soy feliz con él, quiero decir que no es mi culpa que me gustes un poquito ¿no? - hubo un gran silencio. Repasé mentalmente lo que le había dicho y caí en que había dicho que le quería. Le había dicho a Louis Tomlinson que me gustaba un poco ¿por qué?
- Perdona ¿qué? Entonces ¿me culpas por todo eso? - dijo Louis acercándose a mí.
- Sí, es tu culpa ¿por qué tenías que ser tan jodidamente perfecto?
- ¡No soy perfecto! ¡Si hay alguien perfecto aquí eres tú! Has tenido que venir tan guapa y perfecta como cuando nos conocimos ¿no? Tuviste que ser tan simpática, divertida y, encima, empezar a trabajar como modelo. ¡Ni siquiera puedo mirar a Eleanor igual que antes! - Louis estaba tan cerca que nuestros labios estaban separados por muy pocos centímetros.
- Guau ¿qué? - Louis acababa de decirme que sentía algo por mí, que le gustaba un poquito. Entonces alguien llamó al timbre.
- ¡Louis soy yo, Els! ¡Déjame entrar! - gritó Eleanor.
- ¿No estaba en Manchester? - pregunté.
- Eso pensaba yo - susurró Louis - mierda. ¡Ve a la planta de arriba! - lo obedecí y justo entonces Eleanor entró con la copia de la llave que Louis le dio hace mucho tiempo. Me metí en la habitación de Louis y cerré la puerta con mucho cuidado para no hacer ruido. Mientras que estaba allí decidí echar un vistazo por la habitación. Había ropa tirada por el suelo, incluso ropa de Eleanor, en su mesita de noche había un marco roto con una foto de ellos dos y había cojines tirados por el suelo ¿qué coño había pasado? Decidí escuchar qué estaba pasando abajo, así que pegué la oreja a la puerta y me esforcé por escuchar lo mejor que pude.
- He vuelto para intentar arreglar las cosas antes de que empiecen los exámenes y de paso llevarme alguna ropa - ¿Arreglar las cosas? ¿Qué había pasado? Un momento. ¡Su ropa estaba aquí, tirada por el suelo de la habitación de Louis! Empecé a escuchar pasos subiendo las escaleras, cada vez más cerca. Me puse muy nerviosa, no sabía que hacer.
- Els, ¿te quedarás unos días?
- Sí, dos o tres ¿por?
- Te doy tu ropa luego ¿vale? La lavaré y te la doy luego - dijo Louis cuando se dio cuenta de que seguramente yo estuviera allí.
- De acuerdo - escuché pasos que se alejaban, eso significaba que Eleanor estaba bajando las escaleras. Respiré hondo, me senté en el suelo y entonces me di cuenta de lo que acababa de hacer. Le había dicho a Louis que le quería cuando obviamente no era verdad, yo quería a Ronnie.
- Entonces, ¿qué hacemos? - preguntó cuando subió y se sentó a mi lado. Buena pregunta la que me hizo Louis. ¿Qué hacíamos? ¿Seguíamos siendo amigos como si no nos hubiéramos dicho nada o dejaba a Ronnie e intentaba algo con Louis? Pero es que se me partiría el corazón al ver la cara de Ronnie cuando lo dejara y le hiciera daño ¿Y si la solución era olvidarlo todo? Mi cabeza era un lío y no sabía que hacer así que le di un beso en la mejilla, me levanté y me despedí con un "llámame" - te llamaré luego.
Me fui de su casa y puse rumbo a la mía. Cuando llegué me tiré en la cama, no me moví, no comí, no dormí. Quería estar despierta por si Louis me llamaba, sabía que estaba ocupado preparando su tour por USA y Australia así que cuando llamara tendría que aprovechar esa oportunidad y cogerlo. Me sobresalté con un PING.
Ronnie #4: "Ya estoy mejor, ¿te pasas por mi casa y salimos a pasear?"
Yo: "Lo siento, me encuentro mal. Te prometo que mañana nos vemos"
Ronnie #4: "Quizás te haya contagiado. Descansa, que tengo muchas ganas de ver a lo más bonito de mi vida, te quiero xx."
Yo: "Ooh :) xx"
No era capaz de decirle que yo también le quería. Pero yo sí lo quería, de eso estaba segura, lo que pasaba es que últimamente me había decepcionado mucho y quería probar suerte con Louis.


[Narra Zayn]
Estaba tumbado tan tranquilo en el sofá aprovechando que todos dormían y que Liam estaba con Danielle cuando alguien llamó a la puerta. Eleanor.
- Hola - me dio dos besos - ¿está Louis?
- Está dormido pero si quieres le despierto - la dejé pasar y se quedó de pie esperando a que le diera permiso para sentarse. Me gustaba mucho esta chica, era muy guapa y muy madura, quizás un poco celosa pero era encantadora, o por lo menos eso pensaba yo. Subí a la habitación de Louis, lo desperté y bajé a hacerle compañía a Eleanor mientras él se preparaba un poco para ella - ¿no estabas en Manchester?
- Sí - dijo con una sonrisa preciosa - pero he vuelto para pasar unos días con Louis antes de los exámenes - entonces llegó el Rey de Roma - buenos días cielo - ella se acercó y se dieron un tímido beso. Me fui a mi habitación para dejarles un poco de privacidad, me tumbé en la cama y dejé que le tiempo pasara. 
Un grito me sobresaltó y miré el reloj. Las 11h. No sabía por qué me había despertado tan temprano antes pero lo que sí sabía era que Louis y Eleanor me habían despertado con sus gritos. Gritaban mucho, más que nunca y eso me ponía incómodo así que me fui a la habitación de Harry para que me distrajera un poco. Estaba dormido así que lo desperté tirándole un poco de los rizos, finalmente se despertó y me lanzó una mirada de "te voy a matar".
- Louis y Els se están peleando de nuevo - dije poniendo cara de bueno.
- Bueno, te dejo que te quedes aquí conmigo - me hizo hueco en su cama - ¿por qué discuten ahora?
- No sé, la verdad pero llevan gritando unas 2h - hubo un gran silencio - oye, necesito que luego me lleves a casa de Delilah para que le de a Audry una caja de Oreos.
- Nunca entenderé por qué quieres cebar a Audry...¡hoy es miércoles!
- Y mañana jueves, con esto ya hemos repasado los días de la semana.
- ¡Capullo! - me pegó en el brazo - ¡que Audry se va!
- ¿Cómo que se va? ¿A dónde? ¡Nadie ha dicho nada! - no podía creerlo ¿por qué se iba? ¿Y si era por mi culpa?
- Iba a contároslo nada más que Delilah me lo dijo pero se me olvidó - rió - su vuelo sale a las 14h.
- Vamos a su casa a buscarla - no se podía ir, no lo iba a permitir.
- No sabemos dónde vive.
- Pues vamos a la casa de Del y que ella nos lleve.
- Vale, voy a vestirme - se levantó con movimientos muy lentos - ¿tú no te vistes?
- No hay tiempo.
- Estás en pijama y descalzo.
- Pues déjame unos zapatos ¡rápido! - tardamos 10 minutos en salir de su habitación, bajamos las escaleras con cuidado y salimos de allí, fuimos al garaje y nos encontramos con alguien que hacía mucho ruido.
- ¿Qué hacéis los dos a oscuras en el garaje? - preguntó riendo.
- De puta madre - me quejé - Niall, ¿qué haces borracho un miércoles a estas horas?
- Tenía ganas de fiesta - rió.
- No tenemos tiempo, debemos ir a casa de Delilah ¡ya!
- ¿Por qué?
- Audry se va a Irlanda para siempre - resumió Harry.
- ¡Me apunto! - dijo Niall poniéndose recto e intentando ponerse serio. - de camino al coche a Niall le dio un ataque de risa al verme andar con los zapatos de Harry que me quedaban enormes y andaba arrastrándolos como si fuera un zombie. Al montarnos en el coche Harry me dijo que ya eran las 12h, así que lo más probable era que ella estuviera ya en el aeropuerto.
- Harry, por tu madre - dije serio - dime que sabes de qué aeropuerto sale su vuelo.
- La verdad es que no.
- ¡Joder! - di un golpe en la guantera - ¡En Londres hay cinco aeropuertos!
- Vayamos a Heathrow - dijo Niall - es el aeropuerto más conocido.
- Y el más grande - dije.
- No perdemos nada por ir allí - dijo Harry conduciendo en dirección a ese aeropuerto. Esperaba que estuviera allí, lo necesitaba.
- Eso me recuerda a las películas románticas, tío - dijo Niall con tono soñador desde el asiento trasero - deberíamos besarla cuando la rescatemos.
- No la vamos a rescatar - dijo Harry entre risas. El camino fue muy entretenido, no parábamos de reírnos de Niall, que nada más que hacía tonterías o se reía solo. 
Llegamos a Heathrow a las 12:45h y teníamos poco más de una hora para encontrarla, si es que estaba allí.
Ahí estábamos nosotros. Harry, Niall tambaleándose y riéndose y yo con los zapatos de Harry que apenas podía andar. Niall tenía razón, parecía una película romántica barata pero con una excepción, al final no habría beso. No podía imaginarme mi vida sin Audry ahora que la gritona esa había entrado de lleno en ella.



No hay comentarios:

Publicar un comentario