Capítulo 2.

El 12 de enero se hizo de esperar pero llegó. Me desperté llena de energía y nerviosismo, ni siquiera desayuné, me daba miedo vomitar delante de los chicos y que pensaran que era asquerosa. Quedé con Ronnie para comer y pasar un poco de tiempo juntos antes de ir con Audry a la firma de discos así que decidí vestirme. Me puse unos vaqueros pitillos con una camiseta turquesa de Roxy, una sudadera amarilla en la que ponía "Free Hugs" y mis converse del mismo color, me recogí en pelo en una trenza de raíz muy larga, iba perfecta. Yo vivía en el nº 20 de Cromwell Road y habíamos quedado en Covent Garden así que cogí el metro en Earl's Court y me bajé en la parada de Covent Garden. Ronnie me esperaba sentado dentro de un buffet de comida italiana, mi sitio favorito en todo Londres, bueno, ese buffet y un restaurante chino que había en el Soho. 
- Hola - dije mientras me acercaba a la mesa.
- Qué guapa estás - se levantó y nos dimos un pico.
- Gracias - sonreí - tú también estás muy guapo.
- Pero la diferencia es que yo me he puesto guapo para ti y tú te has puesto guapa para One Direction.
- Ronnie no seas tonto - reí - me he puesto guapa para ellos pero tú eres el único que me dice lo guapa que estoy, tú eres mi novio.
- Espero que todavía recuerdes eso de que soy tu novio dentro de dos horas.
- He quedado contigo para tranquilizarme antes de la firma, no para discutir sobre tus celos sin sentido.
- Está bien, lo siento - sonrió - ¿vamos a coger algo de comer?
Nos levantamos, cogimos una bandeja cada uno y nos llenamos los platos hasta arriba, si había algo que nos gustaba a los dos, era comer hasta hartarnos. La firma era en La City y quería estar allí una hora antes para no perder la oportunidad de verlos así que Ronnie pagó y me acompañó en metro hasta el lugar de la firma. Por el camino me llegó un mensaje de Audry "Compra una magdalena de chocolate y una vela y pídele un mechero a Ronnie". Antes de llegar al centro comercial de la firma, compramos lo que me había pedido y le cogí el mechero a Ronnie, él no fumaba pero siempre llevaba un mechero encima, en fin, cosas de tíos. 
Por fin llegamos al centro comercial, era un centro comercial nuevo, lo habían inaugurado en diciembre y no era muy conocido. Era enorme y estaba lleno de tiendas de ropa y música, era el santuario de millones de chicas amantes de las dos cosas. Iba andando con Ronnie cogidos de la mano al lado de la cola en busca de Audry cuando oí que alguien me llamaba. Levanté la vista y la vi de puntillas y moviendo mucho los brazos para que viera dónde estaba.
- Gracias por acompañarme, Ronnie.
- No hay de qué - nos besamos, fue un beso largo de estos que te dejan con ganas de más - Que no se te olvide llamarme luego.
- Tranquilo.
- Te quiero - me dio un beso en la mejilla y se fue. Me acerqué a Audry dando saltitos de emoción y nos abrazamos, estábamos muy nerviosas y necesitábamos descargarlo de alguna forma.
- Tía mira dónde estamos - gritó, estábamos muy cerca de la puerta, éramos las quintas o las sextas y todo gracias a ella, que se había quedado toda la noche durmiendo allí - ha merecido la pena no dormir.
- ¿Has traído algo para los chicos?
- No, pero habrás traído lo que te pedí para Zayn ¿no? - asentí.
- Aquí está - lo saqué todo de la bolsa y miré a Audry de arriba a abajo. Iba en vaqueros con una camiseta turquesa y una varsity azul marina idéntica a la de Zayn, se había vestido así para llamar su atención.
- Bien, pues cuando nos vaya a tocar el turno ponemos la vela en la magdalena, la encendemos y le cantamos "Cumpleaños Feliz" a Zayn ¿de acuerdo?
- De acuerdo.
Los chicos aparecieron provocando el grito de todas las fans que estábamos allí, primero Liam, luego Niall, luego Zayn, depsués Louis y por último Harry, así es como se sentaron. Dieron las gracias a todas las que habíamos ido y empezaron a firmar CDs. 
Por fin tocó nuestro turno, había gritado todo el tiempo pero ahora tocaba aparentar ser una persona normal así que sonreí y caminé por la alfombra roja que habían colocado, estaba muy nerviosa así que solo sonreía.
- Hola - dijo Liam, le tendí el CD.
- Ho-ho-hola - mierda, parecía tonta, putos nervios - Gracias por seguirme en Twitter, Liam - por fin había formado una frase con sentido.
- No hay de qué - me devolvió el CD y fui hacia Niall.
- Hola Niall - dije antes de darle el CD, hablar antes con Liam me había ayudado y ahora estaba más sueltecita.
- Hola guapa - sonrió. Vale, había muerto. Niall me había dicho guapa.
- Te he escrito una carta - se la di - me gustaría que la leyeras.
- Claro, muchas gracias - me devolvió el CD. Ahora era el turno de Zayn así que esperé a que Audry terminara de hablar con Niall. Cuando se acercó cogimos la magdalena, le pusimos la vela y la encendimos.
- Cumpleaaaaños feeeeliiiiz, cumpleaaaaños feeeeliiiiz te deseeeean Del y Audry, cumpleaaaañoooos feeeeliiiiz - Zayn se levantó de la silla, nos abrazó y nos dio un beso en la mejilla a cada una.
- Muchas gracias chicas - cogió la magdalena y le di el CD.
- De nada - dijimos a la vez - te he traído una carta - se la di.
- La leeré nada más que termine la firma - sonrió y me devolvió el CD.
- Gracias - sonreí y dejé a Audry que tuviera 5 segundos de conversación con su futuro marido.
- ¿Sabes? - dijo Louis nada más que llegué a él - tengo una norma ¿sabes cuál es? - negué con la cabeza - obedecer a todos los textos de camisetas y sudaderas - miré mi sudadera y sonreí - ven aquí - se levantó y abrió los brazos para que le abrazara. Dios, si había muerto con lo de Niall imaginaos con ésto. Después de abrazarnos le di el CD.
- Te he traído una carta - se la di.
- Gracias - me miró y sonrió con esa sonrisa suya en la que entrecierra los ojos un poco - ¿cómo te llamas?
- Delilah - sonreí.
- Supongo que sospecharás por qué me encanta tu nombre ¿no? - reí - solo por eso te has ganado otro abrazo. - vale, muerte triple. Este abrazo fue mucho más largo, al acabar me devolvió el CD.
- Gracias - me fui hacia Harry y le di el CD.
- Hola Hazza  - canturreé.
- ¿No tienes más magdalenas?
- No - reí - tengo un chicle de fresa.
- Eso me vale - le di el CD, saqué un chicle y se lo di - ¿para mí no tienes carta?
- ¡Hostias! Se me olvidaba - reímos, su risa era preciosa - también te doy la de Liam, que estaba tan nerviosa que no he podido reaccionar a tiempo.
- Vale - dijo entre risas - ¿vas al concierto?
- Claro - sonreí - adiós.
Seguí caminando hasta el final de la alfombra roja y esperé a que saliera Audry, cuando estuvo a mi lado, salimos del centro comercial aparentando ser normales pero una vez fuera empezamos a gritar y a bailar.
- ¡Zayn nos ha abrazado y nos ha dado un beso! - gritó.
- ¡Louis me ha abrazado dos veces! - grité.
Después de dar un paseo y tranquilizarnos un poco, cogí el metro y me fui a mi casa. Estaba feliz por haber conocido a los chicos pero me había decepcionado que no hubiera habido un flechado, que no hubiera pasado nada de lo que yo había leído en numerosos fanfics. Al llegar a casa me duché y twitteé sobre lo ocurrido "No puedo creer que Louis me haya abrazado dos veces y que Zayn me haya abrazado y dado un beso en la mejilla!". Yo tenía 1900 seguidores pero a raíz de ese tweet fueron creciendo, de manera que antes de acostarme tenía 1975.


Por fin llegó el día del concierto, había dormido durante todo el día anterior para poder darlo todo en el concierto. Audry y yo habíamos pasado todo el día en la cola para poder tener un buen sitio así que cuando abrieron las puertas estábamos en segunda fila. Los chicos empezaron con Torn, siguieron con Forever Young, canción en la que me harté de llorar y Another World, luego hicieron un descanso. Iba muy guapos, con la típica ropa que se ponían para los conciertos y con sus peinados de siempre pero yo los veía más guapos que nunca. Continuaron con One Thing, Everything About You, Up All Night, Tell Me A Lie, Taken, More Than This, Same Mistakes, Gotta Be You, Stand Up, Moments  y terminaron con I Want. Había jurado que Louis me había mirado durante su solo en Moments pero claro, no estaba segura porque tenía los ojos llenos de lágrimas. De lo que sí estaba segura era de que Zayn y Harry habían mirado hacia nosotras en más de una ocasión e incluso me atrevería a decir que Zayn no le había quitado los ojos de encima a Audry. 
Al acabar el concierto nos fuimos a cenar a Nando's para ver si nos encontrábamos allí a los chicos pero no fue así. Durante la cena no paramos de gritar lo flipadas que estábamos y los momentos que nos habían gustado más del concierto. 
Al llegar a casa, me duché, les conté todo a mis padres y me conecté a Twitter, ya tenía 2.153 seguidores. Twitteé sobre el concierto "Ha sido increíble, el mejor concierto de mi vida!!" estaba respondiendo menciones de mis amigas cuando recibí una que hizo que se me parara el corazón "He leído la carta que le diste a Harry, me ha encantado, eres la única Delilah a la que sigo así que supongo que eras tú, espero que Louis no me haya engañado al decirme que te llamabas así xx." Había muerto, Liam me había twitteado por primera vez ¡y sin que yo lo mencionara! No sabía que responderle así que me limité con un "Sí soy yo lol, muchas gracias por leerla enserio. PD: vuestro concierto ha sido alucinante xx." Iba a morir de un momento a otro, Harry le había dado la carta y le había gustado tanto que le había preguntado a Louis cómo me llamaba para responderme. Miré mis seguidores, 2.307, vaya, esto era alucinante. Al día siguiente comenzaba el colegio así que me fui a dormir, no sin antes twittear "Buenas noches, os quiero xx".


La mañana de colegio se me hizo corta y entretenida, todo el mundo nos preguntaba a Audry y a mí por los chicos, por cómo eran en persona, por cómo olían, en fin. El día de colegio estuvo muy bien salvo por una pequeña discusión que tuve con Ronnie. Se me olvidó llamarle después de la firma, estuvo llamándome el día antes del concierto pero lo tenía apagado para tener suficiente batería al día siguiente y me volvió a llamar el día del concierto pero obviamente no me di cuenta. Fue una pequeña pelea de novios que no llevaba a ningún lado así que me perdonó y lo solucionamos enseguida con un par de besos.
Al volver a casa, mi madre había preparado mi comida favorita y nos estuvimos contando lo que nos había pasado a cada uno el primer día de clase y, en el caso de mis padres, de trabajo. 
- Cambiando de tema, Delilah - dijo mi madre - he encontrado un papel con un número de teléfono apuntado tirado en el suelo de tu habitación.
- ¿Un número de teléfono? - pregunté extrañada.
- Sí, te lo he dejado encima del escritorio por si era importante.
- No le suelo pedir el número a nadie - dije confusa.
- Pues llama para saber de quién es - dijo mi hermano. 
Nada más terminar de comer, subí a mi habitación para ver de qué número se trataba. No lo conocía de nada y tenía intriga en saber de quién era y como había llegado hasta el suelo de mi habitación así que llamé.
---------------- CONVERSACIÓN TELEFÓNICA ---------------------
- ¿Sí? - preguntó una voz de hombre, diría que un hombre joven.
- Hola, buenas tardes - carraspeé - me he encontrado su número en mi habitación y me gustaría saber quién es.
- Puto Louis - dijo entre risas.
- ¿Perdone?- no había entendido muy bien lo que había dicho.
- Nada, nada - rió - ¿qué te parece si quedamos debajo de Marble Arch y así descubres quién soy?
- Vale, ¿a qué hora?
- ¿En dos horas te parece bien?
- Sí, hasta luego.
--------------- FIN DE LA LLAMADA ------------------------------------
A ver, habíamos quedado en Marble Arch en dos horas lo que significaba que, si quería llegar un poco antes, debía salir de mi casa en una hora. Me puse mis vaqueros con una camiseta de rayas de mangas largas y una sudadera turquesa lisa preciosa, me puse mis botas más informales y me hice un semi-recogido precioso que me hacía el pelo mucho más lago de lo que lo tenía. El cielo estaba nublado así que cogí mi paraguas amarillo por si se ponía a llover y salí de casa. Cogí el metro en Earl's Court, hice varios cambios de líneas y llegué a Marble Arch justo a tiempo. Mientras me acercaba al sitio del encuentro podía ver a un chico debajo del arco, su ropa, su pelo, su cara, todo me sonaba. 
- Eres Delilah ¿verdad?- preguntó nada más que me coloqué bajo el arco de mármol. Vale. Había muerto. Era él. ¿Qué coño hacía yo con su número? No podía creer que había quedado con él.